jueves, 5 de julio de 2012

Liderazgo para el Cambio


Edtih Aranda*
   La autoestima es ocuparse de conocer  las características, capacidades y limitaciones, las cuales deben ser aceptadas sin tratar de negarlas, filtrar los pensamientos positivos y buscar una salida favorable  a las diversas situaciones de la vida, con entusiasmo y valor.
   Es también la confianza en uno mismo, para asumir riesgos e intentar cosas nuevas, enfrentar el cambio sin temor aunque no se tengan todas las respuestas claras, es la única manera de crecer.
   Una autoestima fortalecida es fundamental para la formación de líderes; lideres para el cambio que sean capaces de asumir compromisos como también consecuencias de sus actos ya sean positivas o negativas, sin buscar culpables en terceros ni compadecerse de sus errores simplemente busca y halla soluciones.
   Un líder es siempre coherente en lo que piensa, dice y hace es el ejemplo a seguir en su equipo de colaboradores, es aquel que motiva, inspira e influye sin tiranía y obtiene seguidores por voluntad propia de los mismos sin ejercer ningún tipo de manipulación.  Continuamente vemos la aparición de personas que son presentadas como líderes, concepto utilizado erróneamente en la mayoría de los casos ya que es confundido con fama o poder.
   El líder es aquel al que le concierne los sentimientos y pensamientos de sus compañeros y  tiene confianza en ellos, aquel que demuestra interés en escuchar y considerar todas las ideas y sugerencias, para lograr esto debe facilitar la comunicación, la accesibilidad es fundamental.
   En nuestro país es muy común la ocupación de cargos gerenciales por diversos motivos ya sean amistad, parentesco, relaciones políticas o cualquier otro que no sea la actitud y aptitud para ello. Desde luego esto afecta a las organizaciones de manera significativa tanto operativa como también en el desperdicio de capital humano evitando que las empresas se desarrollen en todo su potencial. La falta de valores que atravesamos va de la mano con esta situación ya que los gerentes creen que su cargo les da una postura para lucirse e impartir temor olvidándose de la responsabilidad y la obligación, asumen una postura de ser dueños de la verdad y de que no hay punto de discusión sobre sus decisiones sin importar si son las correctas.
   Es tal la falta de liderazgo que existe en nuestro país que vamos al extremo en el que hoy tenemos un presidente electo por 39 personas que también creen ser líderes ya que tienen la libertad de imponer su voluntad sin importar la opinión de su gran equipo que es el pueblo paraguayo.
   Mas triste aun me pareció la actitud del presidente electo que aun cree que subirse a una tarima y hablar con un tono de voz elevado y autoritario e invocando unas palabras en nuestro idioma guaraní lo hace un gran líder, que toma su bastón de mando como si fuera la varita mágica  de Harry Potter promete una serie de cosas imposibles de realizar en el periodo de tiempo con el que cuenta para su gestión y piensa que todo el auditorio queda convencido con su capacidad de liderazgo.
   El gran problema por el que se atraviesa en la sociedad actual es que todos quieren ser líderes, pero aquel al que describía anteriormente el que desea poder en lugar de voluntad colaboradora, y de esa manera poco podremos avanzar hacia el cambio.
   Es urgente y necesario el cambio, ese que debemos iniciar cada uno en nuestro interior para que así como hoy nos damos cuenta de la manera en la que intentan tomarnos el pelo con actos como estos podamos ser capaces de combatir y triunfar como verdaderos lideres siendo el ejemplo a seguir y ya no a través de las mentiras y el temor, debemos ser capaces de formular objetivos creíbles y factibles, y la única manera de lograr esto es educándonos y capacitándonos día a día, no saciarnos nunca de obtener información y conocimiento,  ya que solo la sabiduría nos hará realmente grandes. (Muchas Gracias Edith). 
*Actualmente está cursando la Maestría en Administración de Negocios de la UNAE.

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