*Stella Balletbo
Cuando
digo del Paraguay al mundo, me estoy refiriendo a la exportación, que es él envió de bienes y servicios al mercado mundial. El Paraguay es un país noble y una
de sus principales características son sus suelos fértiles, con abundantes
recursos naturales, además de sus productores orientados a aumentar su
competitividad exportadora.
Hoy en día se han sumado nuevos
productos de exportación como las motocicletas, manufacturas de plástico,
prendas de vestir artesanales, frutas, lácteos, hortalizas; que se suman a los
ya tradicionales como la madera, el algodón y la carne. Cada producto y
mercado, debe contar con la información necesaria y las estrategias adecuadas
para estar preparados, requisito imprescindible para que una empresa nacional
logre crecer más allá de sus fronteras.
El 11 de octubre se celebra el día de
la yerba mate, producto nacional de exportación, la
yerba paraguaya como se lo conoce, o yerba mate de los jesuitas; originaria de las
cuencas del Alto Paraná, Alto Uruguay y
algunos afluentes del Río Paraguay donde crece en estado silvestre, sobre
todo formando parte del sotobosque o del estrato mediano de los montes.
De las hojas y ramas, secas y molidas de esta se prepara el mate, una infusión común
en la gastronomía de Argentina, Brasil, Bolivia, Paraguay, Uruguay y Chile. Hay
tres formas básicas de consumir la yerba mate, que reciben distintos
nombres:
La forma más común es el mate,
una infusión que se prepara en un recipiente, si el recipiente es de la
variante de boca ancha se le llama "porongo", en
donde se vierte agua entre 75 y 82 grados de
temperatura, que se succiona por medio de una bombilla.
El tereré es similar al mate, pero se lo prepara
con agua natural o bien fría. El mate cocido es una infusión,
para prepararlo; primero se hierve la yerba mate en agua, y posteriormente se cuela y
se sirve en una taza, ha sido en gran
parte desplazada por el mate cocido preparado en bolsitas, similares a las del
té común. El mate cocido fue conocido como té de los jesuitas o té paraguayo. La yerba fue consumida desde tiempo inmemorial por
los pueblos guaraníes guaycurúes,
que recogían las hojas de ka´a en la selva, donde crecía en forma
silvestre. Inicialmente las mascaban, luego las prepararon en infusión.
Iniciado el período
de dominación hispano-portuguesa en América del Sur, la costumbre de beber la
infusión fue extendiéndose. Hacia fines del siglo XVI y comienzos del XVII, los
españoles consideraron al mate como un vicio peligroso. En abril de 1595, el teniente
gobernador de Asunción, Juan Caballero Bazán, prohíbe el tránsito por los yerbales y el cultivo.
Con la llegada de la Compañía de Jesús al Paraguay a principios del 1600 y hasta 1630, se prohíben el consumo de mate y la exportación de la yerba. Pero la prohibición del consumo sólo sirvió para atraer la curiosidad de los conquistadores. Hacia 1600 se consumían en Asunción cerca de 500 kilos de yerba al día. En 1611 Marín Negrón, gobernador de Asunción, impone penas para los que fueran sorprendidos “en posesión de yerbas”: cien latigazos si el infractor era indígena, cien pesos de multa si era español.
Con la llegada de la Compañía de Jesús al Paraguay a principios del 1600 y hasta 1630, se prohíben el consumo de mate y la exportación de la yerba. Pero la prohibición del consumo sólo sirvió para atraer la curiosidad de los conquistadores. Hacia 1600 se consumían en Asunción cerca de 500 kilos de yerba al día. En 1611 Marín Negrón, gobernador de Asunción, impone penas para los que fueran sorprendidos “en posesión de yerbas”: cien latigazos si el infractor era indígena, cien pesos de multa si era español.
Finalmente, el
cultivo fue autorizado a los jesuitas, que lo monopolizaron hasta que fueron
expulsados en 1767.
Los jesuitas lograron domesticar la planta, mediante técnicas de secado de la
semilla, lo que permitió extender las plantaciones al punto que la venta de
yerba mate se convirtió en la principal fuente de ingresos de las “reducciones”.
Hoy en día, la yerba
mate, es ampliamente cultivada. Según la FAO, Brasil es el mayor productor de
yerba del mundo, con 434.727 toneladas (53%), seguido por Argentina con 300.000
toneladas (37%) y Paraguay con 76.663 toneladas (10%). España y Bolivia son
los países que más demandan yerba paraguaya. El sector yerbatero mantiene un
crecimiento constante en cuanto a producción y superficie cultivada, si
hablamos de las grandes industrias. Sin embargo, pequeños y medianos
productores deben hacer varios ajustes para evolucionar conforme a las nuevas
exigencias del mercado.
Una característica de las empresas yerbateras es que, en su
mayoría, son de capital paraguayo o corporativos paraguayos. Es, además, uno de
los pocos rubros en el que se hace toda la cadena productiva dentro del país.
Se exporta muy poco porque casi todo es producto terminado queda el mercado
local.
El negocio de la yerba mate fue cambiando y evolucionando. No solo han mejorado los envases, ya que la mezcla con otras materias primas, como el caso de las hierbas medicinales, han derivado en una serie de nuevos productos.
El negocio de la yerba mate fue cambiando y evolucionando. No solo han mejorado los envases, ya que la mezcla con otras materias primas, como el caso de las hierbas medicinales, han derivado en una serie de nuevos productos.
Dos rubros de renta complementarios deberían estar en toda
finca yerbatera: la producción de leña y el cultivo de hierbas medicinales, producidas
también con buenas prácticas agrícolas. Estas, al igual que la yerba,
tienen mucho potencial para el mercado externo.
Hoy
nos encontramos ante un mercado globalizado, que nos hace multiplicar los
esfuerzos para poder ser competitivos en el mercado externo. Ya no alcanza con
tener un buen producto o un buen precio, sino que debemos fabricar lo que el
mercado pide y consume; es decir adaptar nuestro producto a la demanda y no la
demanda a nuestro producto.
En
el comercio exterior, no hay resultados milagrosos ni casuales. El proceso en
sí suele ser prolongado y es necesario establecer una estrategia seria en la
que puedan determinarse los pasos a seguir, analizando los resultados y
efectuar los cambios que el proceso pueda determinar. (Muchas Gracias Stella!)
*Actualmente se encuentra cursando la Maestría en Administración de Negocios en la UNAE.